domingo, 27 de septiembre de 2009

No me acompaña la suerte que, por ahí, tienen otros delanteros. Soy consciente que algunas veces me equivoco en la definición, una falencia que suelo asumir. Trataré de mejorar, aunque reconozco que la suerte me esquiva y que tiros que generalmente van adentro pegan en el palo o los salvan en la línea”.
Quien lee esta declaración (suya) a La Nueva y lo haya visto en una cancha, sin dudas puede notar que describe a la perfección lo que fue la carrera -o sus condiciones de atacante- de este rápido puntero que supo vestir la aurinegra.
A diferencia de la mayoría de los jugadores, nunca realizó divisiones inferiores y comenzó a darle a la pelota, ya siendo mayor de edad, cuando a los 18 años empezó a disputar la Liga de Chascomús con la camiseta de Las Mandarinas de Brandsen para luego pasar a Tiro Federal de la misma liga.
Hincha confeso del lobo de La Plata, ciudad donde nació el 29 de de octubre de 1973, a los 23 años lo vio Sergio Benet y se lo recomendó a Jorge Ginarte quien se lo llevó a jugar la Primera B para Temperley.
Luego su carrera continuó en Los Andes –otra vez con Ginarte- donde estalló jugando la B Nacional logrando el ascenso a la máxima categoría. Pero el equipo de Lomas solo se mantuvo una temporada en la que el ‘Pitufo’ disputó 29 partidos con dos goles pero le hicieron sentir el peso de la inexperiencia con una suspensión por cuatro partidos.
Pese irse a la B Nacional con el mil rayitas, arregló condiciones con Belgrano de Córdoba para la temporada 2001/02 donde arrancó bien pero luego su nivel (como el de todo el equipo) se vino abajo sumando su segundo descenso consecutivo; apenas un gol a Banfield en 31 encuentros.
Dicen que no hay dos sin tres y por eso luego de coquetear con Gimnasia, Huracán, Chicago, eligió sumarse a Olimpo desechando la posibilidad de cumplir el sueño de todo hincha: vestir la camiseta de sus amores.
Analizar lo que fue su campaña en Bahía Blanca partido a partido sería muy extendido pero a grandes rasgos puede decirse que no solo no marcó goles en los 28 encuentros que disputó (¿Quién podría quejarse de los pocos goles, por ejemplo, de Carrario con todo el laburo que hacía acompañando a Blanco o Castillo?) sino que además tampoco hizo bien el papel de asistidor para quien fuera por adentro.
A las continuas lesiones que fue sufriendo se le sumó la llegada de Cristian Castillo que terminó de sepultar cualquier posibilidad de ser titular en el Clausura merced a la magnífica sociedad que formó con el ‘Tweety’, cumpliendo éste último el papel de buscar por los costados.
Para los amantes de los números, en el Apertura 2003 jugó 17 partidos (10 de titular, en total 976 minutos, un promedio de 57,4 por partido) y en el Clausura 2004 jugó apenas 11 encuentros (solo 1 de titular, en total 238 minutos, un 21,6 de promedio).
En julio del 2003 lo ofrecieron junto a Pablo Mannara en Quilmes pero no convenció y se volvió para Córdoba y disputó 21 encuentros (un gol) de la B Nacional con el pirata.
A Defensa y Justicia llegó de la mano de Ginarte pero prácticamente no jugó (9 partidos) y de ahí en más, podría decirse que su carrera fue un tobogán que lo hizo recorrer desde la B Nacional, el Argentino A, la Primera B, la Primera C para terminar en la Liga de Chivilcoy. De más está decir que el descenso de categorías iba proporcionalmente relacionado con la calidad de sus presentaciones (mucho lo perjudicaron las lesiones) y no fue por mera sorpresa.
Quizás lo peor fue lo que le tocó vivir en Excursionistas. Llegando nada menos que del clásico barrial, se sumó vendiendo más humo del que su fogata podía generar (“El objetivo es ascender. No me conformo con pelear arriba") pero terminó siendo un fiasco como ese equipo, aunque al menos marcó dos goles. No solo no ascendió ni peleó arriba sino que el equipo terminó último en la Primera C por primera vez en su historia.
“¿Si pienso en el retiro? No lo veo ni muy lejos ni muy cerca. Ahora estoy haciendo el curso de técnico, pero mientras me sienta bien, voy a seguir jugando. Calculo que tiraré uno o dos años más...”, le decía al Diario Olé en esa misma nota y así fue. Tiro un año más, jugando con el club Independiente la Liga de Chivilcoy para luego sí dar final a su carrera dentro de las canchas y empezar a ver los partidos desde el banco; actualmente dirige a Tiro Federal de Chascomús.
Siempre quedará en varias personas la duda de saber si éste veloz punta que supo ser, además del terror a subirse a los aviones, le sumaba un miedo escénico al área contraria o a los arqueros. Es algo que solo el ‘pitufo’ sabe.

TRAYECTORIA

1998-1999 Temperley (Primera B)
1999-2000 Los Andes (B Nacional) (18P – 2G)
2000-2001 Los Andes (Primera División) (29P – 2G)
2001-2002 Belgrano
de Córdoba (Primera División) (31P – 1G)
2002-2003 Olimpo de Bahía Blanca (Primera División) (28P – 0G)
2003-2004 Belgrano de Córdoba (B Nacional) (21P – 1G)
2004 Defensa y Justicia (B Nacional) (9P – 0G)
2005 Atlético Tucumán (Argentino A)
2006 La Plata FC (Argentino A)
2006-2007 Defensores de Belgrano (Primera B)
2007-2008 Excursionistas (Primera C)
2008-2009 Independiente de Chivilcoy (Liga de Chivilcoy)

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